En el partido de Monday Night Football de hoy, los Texans vencieron a los Jets en el partido estelar de lunes por la noche. De esta manera, siguen perfectos y meten al equipo de Rex Ryan en el hoyo 2-3. En este articulo, las claves del triunfo...
- Balance: Arian Foster fue la clave de la ofensiva de los Texans que, manteniendo su balance, tuvo al corredor estelar como la principal arma. Todos sabemos de las virtudes de Foster, pero nadie puede detenerlo. Ya sea por dentro de la linea ofensiva o por fuera de los tackles, consiguió quebrar continuamente a la defensiva de los Jets. Foster tuvo 152 yardas en 28 acarreos con 1 TD más 1 recepción de 16 yardas. Una planilla completa.
Los números fueron impactantes, pero no fueron lo único. Schaub tuvo certeza en sus envíos y la diversidad de esquemas utilizados fue beneficiosa para conectar con sus receptores Daniels, Cassey y Walter, todos terminaron con 4 recepciones. Nadie espera de esta ofensiva un gran rendimiento aéreo más teniendo en cuenta el poderío de la secundaria de los Jets, pero hoy se destacaron por su eficiencia.
Los Texans consiguieron 10 primeros downs aéreos y 8 por tierra mientras que lanzaron en 28 ocasiones contra los 35 acarreos que realizaron.
El balance no solo logró mover las cadenas sino que permitió controlar el tiempo de posesión: más de 35 minutos estuvo la ofensiva en el emparrillado. La única mancha de la ofensiva fue en la primera mitad cuando uno de los envíos de Schaub fue interceptado por Cromartie.
- Presión de los frontales: El front seven de los Texans se mostró dominante durante toda la noche, consiguieron 3 capturas de mariscal y forzaron a Sanchez a lanzar con el pocket colapsado. Esta defensiva, comandada por Watt se aprovechó de los inconvenientes de la linea ofensiva de New York y realizó su trabajo de forma eficaz. Watt y Reed terminaron con un sack y este ultimo a su vez forzó un balon suelto que no pudo ser recuperado por la ofensiva.
Los frontales ademas de colapsar el pocket rival constantemente también lograron desviar varios balones, incluso generando intercepciones. Esto fue importante, ya que Sanchez es un pasador de trayectorias slants y la imposibilidad de lanzar pases cortos lo saca de ritmo y lo lleva a improvisar.
Por ultimo, no permitieron grandes acarreos y limitaron a Greene a 8 acarreos y 25 yardas. Nadie esperaba mucho de este juego por tierra, pero los Texans hicieron una buena labor en esta área de juego.
- Falta de talento ofensivo: Es muy fácil caerle a Sanchez por el mal rendimiento de la ofensiva de los Jets, pero se ven grandes problemas y no solo él es el culpable. En una división tan compleja y en una conferencia con rivales tan competitivos como los Texans, tener que utilizar a un esquinero como receptor abierto dice mucho acerca de la profundidad de la plantilla de los Jets.
New York no tiene armas en la ofensiva, definitivamente. Su mejor receptor se lesionó, su corredor no tiene explosión y rara vez gana muchas yardas. Ademas los receptores secundarios son muy jovenes y no ofrecen ninguna garantías. Corren mal sus trayectorias, sueltan pases, cometen castigos, les falta mucho tiempo de desarrollo.
Hubo jugadas de impacto, lograron "big plays" ante una defensiva de primer nivel. Sin embargo, las dificultades de la ofensiva comandada por Sanchez necesita de ritmo y de estabilidad. La inestabilidad de sus armas ofensivas es uno de los problemas que los Jets tuvieron esta noche y que deberán corregir si aspiran a pelear por la AFC Este.