Colts y Bengals se consolidan en sus divisiones con triunfos claves. Acá, una reflexión sobre ambos equipos...
Colts (8-4): Probablemente no haya mucho para rescatar del triunfo de Indianapolis 22 a 14 sobre Tennessee. La ofensiva comandada por Andrew Luck, que ha vencido a equipos como San Francisco y Denver, no puede reponerse a las lesiones y extraña demasiado a Reggie Wayne. A los problemas para consolidar el juego aéreo, se une la falta de un juego terrestre efectivo. A medida que avanza la temporada, las posibilidades de que Richardson despegue y justifique la primera ronda que dieron los Colts por su triunfo desaparecen. Solo corrio para 19 yardas en 5 intentos. Para colmo, premitieron más de 160 yardas terrestres.
Los Colts están 8-4 y la pelea divisional quedó en segundo plano. Con cuatro semanas por jugar, los Colts deberán buscar el camino para recuperar el juego de las primeras semanas. La semana próxima jugarán con los Bengals en un partido fundamental en la busqueda de los primeros dos lugares de la AFC.
Bengals (8-4): Cincy sacó un juego clave este domingo. Luego del triunfo del jueves de los Ravens, los Bengals sabian que solo servía el triunfo para mantener la distancia en una división que todavía no está definida. El rendimiento volvió a ser inestable. Daltón lanzó un pase de TD a AJ Green, y Green-Ellis corrió para otra anotación. En un partido cerrado, Dalton logró sacar adelante el triunfo pero sin demostrar que es un QB que puede llevar al equipo lejos en la postemporada.
Lo positivo del triunfo de los Bengals es que la defensiva volvió a funcionar a nivel elite. Rivers venía jugando en gran nivel y la defensiva de Cincy logró limitarlo a 252 yardas con un pase de touchdown, ademas de lograr interceptarle un pase. El principal problema es el calendario: Bengals aun tienen partido contra los Steelers, los Ravens y los Colts. Serán duras pruebas para ver de que esta hecho este equipo que tanto talento tiene en su plantilla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario