Semana 5: Impacto

Después de la jornada dominical de la semana 5 de la NFL, acá te traemos tres elementos a tener en cuenta. El tiroteo entre Cowboys y Broncos, el nivel de los Saints y el fin de la racha de Brady.

El invicto de los Saints: Luego de 5 semanas, los Saints siguen sin derrota y pasaron un gran desafío el día de ayer al ganarle a los Bears en el propio Soldier Field. Estos Saints no son iguales a los de temporadas pasadas, si bien Brees sigue siendo explosivo desde el backfield y reparte pases de TD entre un arsenal muy destacado, la unidad defensiva al mando de Rob Ryan se está recuperando y luego de 5 semanas ha sostenido a los rivales y no ha permitido más de 18 puntos en ningún juego. Si bien permitieron más de 400 yardas frente a los Bears, solo 2 pases de TD y un gol de campo otorgaron. De aquí en más, si deberán mejorar su juego por tierra. Aun teniendo a Sproles como un arma ofensiva versátil, los Saints no son capaces de correr el balón y esto, cuando la temporada avance, puede ser crucial.

Brady sin récord: Cuando buscaba mantener su racha de partidos con pase de TD, los Patriots jugaron uno de los peores partidos desde que Brady comanda al equipo. Con una linea ofensiva endeble que no ofreció garantías en la protección del QB ni en la apertura de espacios para el juego terrestre, Brady fue muy impreciso. Si bien tuvo posibilidades para anotar un TD, errores de Danny Amendola y Aaron Dobson no permitieron que el estelar QB de los Patriots continúe con su racha de partidos con pase de anotación. Actuaciones como ésta demuestran la importancia que tiene la linea ofensiva en la NFL. Cuando los equipos no brindan buena protección, todo lo demás se desmorona. 

Tiroteo en Texas: En un partido histórico, los Broncos vencieron a los Cowboys 51 a 48 con un gol de campo sobre la hora. Ambos mariscales jugaron en un nivel de elite, Manning lanzó 4 pases de Td y 1 intercepción mientras que Romo lanzó 5 pases de TD y una intercepción. Lo malo para Dallas fue que la intercepción fue en la Red Zone propia a dos minutos del final con el partido igualado en 48. Lo que podía ser una serie ganadora para Romo terminó en un desastre. En un partido tan cerrado, esa jugada definió el juego. Sin embargo, no hay que ignorar la actuación de Romo, quizas el mejor partido de su vida ante el mejor equipo de la NFL.